Colombianos En Londres

Es muy berraco estar fuera del país y es muy duro ser colombiano en Colombia, pero es aún más berraco ser colombiano fuera de Colombia.

Saturday, July 22, 2006

Una historia Inglesa

Al final de la calle, afuera de la casa de Sally Bishop, los hermanos gemelos James y Peter Caldwell estaban recostados en el muro del antejardín esperando a que Sally, la novia de James, el mayor de los dos por 10 segundos de diferencia, prendiera la luz de su cuarto en el segundo piso de la casa. Esa sería la señal de que había llegado bien. Esa era también la condición que les había impuesto el padre de la muchacha para dejarlos ir a la fiesta de cumpleaños de la novia de Peter, el menor por 10 segundos. Los muchachos tenían que asegurarse de que Sally entrara a la casa, llegara bien hasta su cuarto y prendiera la luz.

Cuando finalmente Sally prendió la luz, los gemelos de 18 años suspiraron aliviados. Ya se podían ir a casa. Al día siguiente tenían un partido de críquet y estaban dispuestos a dar el todo por el todo para ganar el juego. Mucha gente tenía las esperanzas puestas en los gemelos. James era un fantástico “fast bowler” como bien lo sabían los bateadores de los equipos contrarios y por esa era el orgullo de la familia y del club para el que jugaba. Peter, aunque era más rápido, no era tan hábil como su hermano mayor a la hora de lanzar la bola, pero lo que le faltaba en habilidad lo suplía con tesón y garra. Definitivamente, juntos eran la perfecta combinación y la esperanza del Woodward Cricket Club para obtener el titulo ese año. La prensa local auguraba un gran futuro para los hermanos cuando fueran mayores, se hablaba incluso de que serían los encargados de devolver a Inglaterra el orgullo que tenía tan embolatado a nivel deportivo. Especialmente en el juego del cricket, en el cual no podían nunca derrotar a ninguna de sus antiguas colonias. El domingo sería su gran día y por eso querían pasar el día entero descansando. ”Tal vez podemos jugar un poco de Playstation para relajarnos” dijo James, el mayor por diez segundos. Peter, sonrió ante la idea de derrotar a su hermano de nuevo, al Playstation el era el mejor. Siempre le ganaba.

Un poco antes de que Sally prendiera la luz, en la otra esquina de esa misma calle, tres muchachos iban caminando tranquilamente calle abajo en dirección adonde se encontraban los hermanos. Eran las 2 de la mañana y el clima estaba delicioso. El pronóstico del tiempo decía que ese fin de semana iba a ser uno de los más calurosos del año en Inglaterra. Cualquier transeúnte que hubiera visto a los 3 muchachos los hubiera descrito como 3 jóvenes de no más de 16 años, ingleses, blancos, altos, bien vestidos con ropa deportiva fina y a la moda, definitivamente jóvenes comunes y corrientes que volvían de una noche de parranda. No parecían especialmente bebidos por lo que el transeúnte no los hubiera volteado a mirar dos veces. A no ser que les hubiera visto la mirada. Los tres muchachos andaban buscando a quien matar.

Sally se dirigió a la ventana para decir adiós después de prender la luz. Como siempre, saldría y le coquetearía a James para despedirse, lo miraría con esa mirada apasionada y llena de promesas que a el tanto le gustaba. “Ya hemos sido novios por tres meses Sally, ¿ya es hora no crees?” le había dicho James esa noche en la fiesta. “Tal vez después del partido Jimmy, no seas tan apresurado” le había respondido ella entornando sus inmensos ojos color azul inglés. “Umm! Tal vez después del partido, ¿porque no?” pensó Sally después de prender la luz. Con ese pensamiento morboso en su cabeza y ese sentimiento tibio y agradable en su bajo vientre Sally llegó a la ventana y abrió la cortina para despedirse. Fue entonces cuando vio como se acercaban los tres muchachos blancos, altos y bien vestidos a su novio y su cuñado. No se veía nada raro, los muchachos parecían normales y hasta con buena presencia, como si fueran del barrio acomodado en el que ella vivía, sobretodo el más alto que parecía levantador de pesas. Pero algo en su lenguaje corporal le decía que algo iba mal con ellos. Un escalofrió le bajo por la espina dorsal a Sally y sin saber porque comenzó a hacer señas desesperadas a los hermanos señalándoles y advirtiéndoles del peligro que su sexto sentido intuía.

Tranquilamente, los tres muchachos se acercaron a los gemelos sin que ellos advirtieran su presencia. James veía a Sally hacer unas señas desesperadas y como que señalaba algo. No, esas no eran las señales que el estaba esperando, no, el estaba esperando una confirmación de lo que tanto anhelaba y que sus jóvenes hormonas le pedían a gritos.

“That bitch your girlfriend man?” Dijo el más bajito de los tres muchachos ya encima de ellos.

Los gemelos voltearon a mirar hacía la voz y por una fracción de segundo comprendieron las señas desesperadas de Sally. El menor de los gemelos diría después que todo había pasado demasiado rápido y que el horror era demasiado irreal para recordarlo con claridad. Además, el corrió por su vida como alma que lleva el diablo perseguido por el tercer muchacho, un pelirrojo con pecas y barros en la cara que sacó una diabólica manopla de acero que terminaba en una punta de puñal muy afilado, diseñada para destrozar y matar. El caso es que James no se dio cuenta cuando el más grande de los tres muchachos, el que parecía levantador de pesas le asestó el primer golpe en el oído que lo tiró al suelo y le cubrió la visión con un manto negro, ni tampoco cuando el más bajito le propinó la primera puñalada que se le metió por debajo de la axila, tan solo sintió como un ardor y como que se le iban las fuerzas por la herida. Y allí, acurrucado a cuatro patas con la visión nublada por un manto negro y rojo de sangre, James, el “fast bowler” del Woodward Cricket Club y del que pronosticaban que algún día jugaría para la selección inglesa, tampoco sintió los otros golpes del muchacho que parecía levantador de pesas, ni las otras 14 puñaladas del más bajito.

Arriba, desde su ventana, petrificada y con sus inmensos ojos azul inglés abiertos hasta el límite, Sally Bishop vio como tres jóvenes comunes y corrientes, vestidos con ropa fina y que por la pinta parecían del barrio de clase media en el que ella vivía, destrozaban a su novio con un odio salvaje y violento. Sally incluso asegura que en algún momento los vio sonreír cuando se echaron a correr a través del parque. Lo mismo asegura Peter, el hermano menor y sobreviviente del ataque inhumano. Aunque no se deberíamos llamar inhumano algo de lo que los seres humanos somos bien capaces: matar por que sí, sin motivo, provocación o necesidad.

PS: Hace unos días pudimos ver en la televisión Inglesa como tres muchachos, menores de edad y de familias acomodadas, destrozaban un pobre muchacho que se encontraba parado en una esquina conversando con otro sin hacerle mal a nadie, inocentes y despreocupados, sonriendo y alegres como deben de ser todos los jovenes de este mundo. Fue tan horrible la escena que nos quedamos de piedra y con un sentimiento maluco en el estomago. No hubo provocación ni motivo, tan solo violencia porque sí. Yo sentí que tenía que escribir sobre ese suceso estúpido e incomprensible, diabólico. Esa violencia sin sentido es la base de esta historia.

14 Comments:

  • At 4:06 PM, Blogger Andres said…

    Aterrador definitivamente ... algo que he podido observar y experimentar en una pequena medida...

     
  • At 6:49 PM, Blogger Pirata Subterraneo said…

    Que historia tan fuerte. He quedado sorprendido. Que dolor que el virus de la violencia se extienda por el mundo.

     
  • At 3:59 AM, Anonymous Anonymous said…

    a mi encanta londres pero esa parte yo siempre le he tenido pavor, incluso me da mas miedo que en mi barranquilla, aqui en este pais tiene todo y no le veo el porque la violencia sin sentido, las armas de fuego estaran prohibidas pero es alarmante el numero de navajas, que dia sali con mi esposo a comer y regresmos tarde y alguien lo empujo al entrar en el tren en clapham juction, el lo empujo de vuelta y aunque no paso de ahi me dio rabia con mi esposo, aqui te joden por nada y que tal que el tipito hubiese tenido una navaja, ese fue mi temor y que paso el lunes siguiente? en el periodico lei de alguien que lo habian apuñalado por que otro lo empujo en el tren, mi temor no es imaginario, y es que aqui estos van apuñalando en el corazon no te dejan herido te quieren muerto.

     
  • At 4:06 AM, Anonymous Anonymous said…

    historias hay muchas como las de estos pobres muchachos , el fin de semana recien llegada a este pais la noticia en swansea era de un muchacho de 17 años, tambien muy bueno en deportes y queridos por todos habia sido asesinado por tres muchachos menores de edad tambien por robarle la tarjeta del banco, lo patearon enla cabeza como balon y despues lo desnudaron para echarlo al mar pretendiendo que se habia ahogado o suicidado, gracias a Dios cojieron a estos muchachos y los han condenado pero dime que pasa con la familia de Ben, como se llamaba el muchacho, y la familia de todos estos jovenes cuyas vidas son acabadas por nada

     
  • At 3:37 PM, Blogger Victor Perez said…

    Cordial saludo:
    Aca pasa lo mismo y peor. La diferencia es que lo puede multiplicar por 5 o 6 diariamente. Lo triste es tanta gente que piensa que en ese pais la vida tiene otro valor.

     
  • At 7:29 AM, Blogger Colombianos en Londres said…

    Andrés, espero que no lo vayas a experimentar en la medida que cuenta la historia. Yo de verdad te digo, que vivo con miedo por tanta violencia en la calle. En este país, los jovenes, incluso algunos niños, cuando te miran te retan, te desafían con la mirada. En fin, es o que hay y toca aprender a vivir con ello y luchar mucho para que los tuyos no se tuerzan.

    Un saludo desde Londres

     
  • At 7:31 AM, Blogger Colombianos en Londres said…

    Quiubo Pirata,
    Violencia para dar y repartir. Sino mira lo que está pasando en oriente medio.

    Un saludo desde Londres

     
  • At 7:33 AM, Blogger Colombianos en Londres said…

    Angelica,

    Vas a venir con tu marido a "El Carnaval Del Pueblo"??? es el 6 de agusto en Burgess Park, parece ser que se ha convertido en el carnaval latinoamericano mas grande de Europa.

    Un saludo desde Londres

     
  • At 7:36 AM, Blogger Colombianos en Londres said…

    Vopa, donde te habías metido???
    Que tal por mi Cali bella??? ya van a acabar con el MIO??? O el MIO va a acabar con Cali???gracias por tu comentario. Y sí, ya ves, cuando uno está en Colombia, uno cree que solo allá se ve la violencia. Sales del país y te das cuenta que en todas partes se cuecen habas.

    Un saludo desde Londres

     
  • At 7:36 AM, Blogger Colombianos en Londres said…

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  • At 12:31 PM, Anonymous Anonymous said…

    claro que vamos a ir, ese dia es nuestro primer aniversario de matrimonio pero que mejor celebrarlo en el carnaval y bueno a el le encanta todas estas cosas, menos mal no me salio tieso y aburrido como la mayoria de los ingleses, que solo van a pubs.ah y me compro boletas para el concierto de jerry rivera el 13 de agosto asi que este mes esta muy latino

     
  • At 2:44 AM, Blogger Sudaka Universal said…

    Vaya, en Colombia por la llevadera y falta de oportunidades dirán muchos...
    Y en el caso de estos 3 jovenes?...

     
  • At 3:00 AM, Blogger Fran Invernoz said…

    La violencia sólo engendra violencia entre los seres que deberían considerarse infrahumanos. La falta de control, lo institivo, no debería pertenecer a la especie humana.

     
  • At 1:31 AM, Anonymous Anonymous said…

    Tambien soy Colombiana y vivo en Londres. Tu blg me parece super interesante ya que tratas tema de actualidad importantes. Un saludo.

     

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